Sigue estos consejos para conseguir un maquillaje de fiesta espectacular y deslumbrá en Año Nuevo.
El complemento perfecto para tu atuendo es un maquillaje de fiesta,
pero el cansancio y el estrés de estos días impiden que tu piel esté
rozagante. Pero no desesperes, vamos por parte. Conseguir una cara
bonita es razón suficiente para preparar y disfrutar de un merecido
ritual de belleza para que el maquillaje de este 31 de diciembre
luzca en todo su esplendor.
Para comenzar, relajate durante unos diez minutos en el sofá de la
sala de tu casa, con una luz tenue y música relajante. Este tiempo te
ayudará a estar bien contigo misma y a mejorar el semblante del rostro.
Aprovecha y colócate en los ojos unos parches descongestionantes para
atenuar bolsas y ojeras. Si los colocas antes en la nevera, suman a la
acción tratante un agradable efecto de frescor.
Acto seguido, limpiá y exfoliá la piel de tu rostro. Hazlo con mucha
suavidad para que la tez no te quede roja por la fuerza que emplees al
exfoliar. Con la misma exfoliante facial, exfoliá los labios para
eliminar cualquier pellejito que pueda arruinar el maquillaje de tu
boca. Luego, humecta con tu hidratante habitual para conseguir una piel
más tersa, suave y luminosa, lo que, en definitiva, ayudará a conseguir
un maquillaje impecable.
Lista la piel, tienes que unificar el tono del cutis para que destaque
e irradie belleza y esplendor. Ya sea en fluido o crema, el corrector,
la base, polvos e iluminadores son los cosméticos adecuados.
Piel
Con un corrector conseguirás cubrir las ojeras, granitos y otras
imperfecciones que tenga la piel. Aplicalo en pequeñas dosis y realiza
pequeños toquecitos con las yemas de los dedos hasta que se funda, sin
estirar ni presionar la piel.
Para disimular ojeras debes cubrir desde el lagrimal hasta casi la
sien, pero usa la cantidad justa para que evites el efecto mapache, esa
sombra blanca que se nota bajo el ojo, sobre todo, cuando te toman una
foto.
Sigue con la base de maquillaje. Acuérdate que debe ser un tono
similar al de tu piel, según el tipo: grasa-seca-mixta, y la edad:
disimular líneas y arrugas y para brindar un plus de nutrición y/o de
firmeza.
Aplícala con ligeros movimientos desde el centro del rostro hacia el
exterior, difuminando suavemente en el cuello, cerca de la raíz del pelo
y en las orejas a fin de emparejar el tono de la piel y obtener un
acabado natural.
Para finalizar, los polvos sueltos ayudarán a sellar la base y a que
la piel luzca radiante y perdure el maquillaje. De forma generosa,
distribúyelos con una brocha ancha por todo el rostro, cuello y escote;
para disimular la papada y la mandíbula usa unos más oscuros. Las
texturas satinadas son ideales para darle un lindo resplandor al rostro,
mientras que los traslúcidos son para matizarlo.
El iluminador tiene otra función: ilumina las zonas apagadas y atenúa
los signos de cansancio. Si lo aplicas en la frente y en los pliegues nasolabiales obtendrás un efecto alisante
espectacular. Si lo aplicas en medio de la frente, parte alta de las
mejillas y barbilla, iluminarás la tez.
Ojos y labios
En el maquillaje de fiesta los ojos tienen gran protagonismo y para
estas fechas la tendencia apuesta por dos estilos: ojos ahumados
metálicos en azul oscuro, gris plomo, verde botella y negro con
destellos. Cualquiera de estos tonos dará a tu mirada un look muy
sensual. El otro estilo, ojos delineados que se reinventan en múltiples
maneras, tanto en el grosor y largo de la línea como en el color de la
misma: naranja, violeta, azul eléctrico.
En ambos casos, dependerá de cómo te vayas a vestir; sin embargo, si
te decides por ojos ahumados metálicos, los labios van en un color
claro, en beige, rosa o durazno pastel. Si te decides por los ojos
delineados, la boca en Navidad se pinta de rojo. Es un clásico que cada
año se reinventa en diferentes tonalidades, pero para este fin de año
podrías lucir labios en el color de 2015: el Marsala, un vinotinto
tostado, ¡probalo!
Por supuesto, no te olvides de las pestañas. Rízalas antes de
pintarlas. Esta temporada se imponen largas, con volumen y curvadas,
como de muñecas; y si las tuyas no son así, opta por las postizas.
Mejillas
El toque final del maquillaje está reservado para el rubor o
colorete, a fin de darle color y volumen a las mejillas. Según la
maquilladora Bobbi Brown, aplicas primero un tono claro sobre el hueso
de la mejilla y extiendes, sutilmente, hacia la sien; luego, aplicas un
color más vivo en la parta alta de las mejillas, difuminando, pero sin
extender, hacia la sien. Ya estás lista.
¡Ah!, y no te olvides de tus uñas
El cobre es un color que esta Navidad sustituye al dorado de todos
los años; el vinotinto, es un color elegante y que también es la
variante al sempiterno rojo; y el gris metalizado, es un color neutro
que está súper de moda. Tú elijes.
Fuente: http://uy.emedemujer.com
